Las mejores telenovelas de Nicandro Díaz de acuerdo a Ángel Adm

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Autor: Ángel Adm

Respeto póstumo

Hace unos días falleció de manera inesperada el productor de telenovelas Nicandro Díaz. Díaz tuvo una vasta trayectoria en el campo melodramático después de trabajar en el equipo de otros productores como Pedro Damián, Juan Osorio y Valentín Pimstein principalmente.

Su deceso ha generado una gran conmoción en el público amante de las telenovelas. He sido un crítico muy fuerte de su trabajo, pero reconociendo que era un hombre de grandes esfuerzos, manteniendo vigencia hasta el día de hoy en múltiples repeticiones de sus producciones.

A su memoria he diseñado este top, de las cuales, para mí, fueron las cinco mejores telenovelas de este productor. Antes, quisiera destacar que fue hecho con base a mi experiencia en el contenido visual de los melodramas y a gusto personal. Por lo tanto, me encantaría que lo recordáramos con estos éxitos:

5.- Gotita de Amor (1998)
Protagonizada por Laura Flores, Alejandro Ibarra y Andrea Lagunes.

Cuando empezó como productor ejecutivo, Nicandro Díaz tuvo una era dorada como se podrá ver en este listado. Cuando Televisa Niños estaba en pie y múltiples actores infantiles protagonizaban historias, él fue un hombre que les dio entretenimiento a miles de niños.

Se trató de un remake de la telenovela Gotita de Gente (1978) basada en la brasileña Pingo de Gente (1971), que lanzó a la estrella infantil Andrea Lagunes. La telenovela tenía un reparto impresionante con figuras como Evita Muñoz “Chachita”, Martha Roth, Irán Eory y Adalberto Martínez “Resortes” por mencionar algunos.

Fue una telenovela corta sin grandes pretensiones.

4.- Mi Fortuna es Amarte (2021)
Protagonizada por Susana González y David Zepeda

En sus últimos trabajos se le consideró un exponente de la barra de comedia ligera combinada con el melodrama. Mi Fortuna es Amarte, si bien, abordó cuestiones como la “jerga típica” utilizada en las tramas de barrio, también tuvo uno de los elencos mejor construidos. Desde un matrimonio conformado por los actores Chantal Andere y Luis Felipe Tovar, hasta una protagonista con garra como Susana González.

Además, lanzó a dos actrices al antagonismo de una manera interesante como Denia Agalianou y Michelle González, esta última interpretando a Olga, una de las villanas más sobresalientes de los últimos años que no dejaba de martirizar a Benja (André Sebastián González), hijo del protagonista.

Uno de los puntos que más aplaudo fue darle un papel digno y diferente a Carmen Salinas en su última participación en telenovelas.

Analizando sus trabajos en la comedia, esta sería el que más resalto.

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3.- Carita de Ángel (2000)
Protagonizada por Daniela Aedo, Miguel De León y Lisette Morelos

Esta telenovela forma un parteaguas en la década de los 2000 para Televisa Niños. Es la que moldearía el fenómeno de las telenovelas infantiles hasta 2006. Si bien, ya teníamos antecedentes como Luz Clarita (1997), Carita de Ángel es la que demostró un triunfo en el marketing infantil desde canciones, fantasía y una narrativa en fórmula que encantó a muchos niños.

En este punto, los actores infantiles tuvieron un mayor destaque e identificación entre el público. Daniela Luján, por ejemplo, ya era un ícono por Luz Clarita (1997) y El Diario de Daniela (1998), Daniela Aedo lo resultó con Carita de Ángel y ¡Vivan los Niños! (2002).

Esta telenovela fue un remake de Papá Corazón (1973) siguiendo el argumento original y evadiendo el de Mundo de Juguete (1974). Aquí sí se conservó la idea de la niña que ve el fantasma de su madre, quien la lleva a convivir en una realidad aparte.

Por supuesto, destacó también la presencia de la primera actriz Libertad Lamarque, quien tras fallecer, fue reemplazada por Silvia Pinal.

El trabajo que hizo Nicandro Díaz en esta producción fue muy significativo porque terminó de delinear el contorno de las producciones para una audiencia de culto, quienes crecimos viendo estas historias.

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2.- ¡Vivan los Niños! (2002)
Protagonizada por Andrea Legarreta, Eduardo Capetillo y Miguel De León

Esta es una de las telenovelas que más lindos recuerdos me trae, ya que fue la primera que vi de manera consciente. ¡Vivan los Niños! es una versión libre de un argumento del argentino Abel Santacruz. Anteriormente se había hecho con gran éxito como Carrusel (1989) y su secuela Carrusel de las Américas (1992), ambas producidas por Valentín Pimstein.

Recrear esta telenovela cuando solo habían pasado 10 años desde la última emisión de una versión antecesora podrá haber sido cuestionable, pero creo que funcionó bastante bien. Las telenovelas infantiles son melodramas dirigidos a un nicho muy específico que con el tiempo pueden volverse de culto. Como adultos no creo que todos quisieran sentarse a ver una historia así de principio a fin, a no ser que estén acompañados por algún menor (hijos u otros parientes).

¡Vivan los Niños! es la telenovela generacional por excelencia, porque fue diseñada para marcar las infancias de los 2000 como Carrusel lo hizo para aquellas de finales de los 80 y principios de los 90.

Es un melodrama que incluso, pudo hacer que a figuras como Andrea Legarreta le guardemos gran nostalgia. Además, ¡qué elenco! Aquí participaron personalidades como Raquel Olmedo, Joaquín Cordero, Ignacio López Tarso, Beatriz Sheridan y Renata Flores entre muchos otros.

La historia no se dedicaba a hablar exclusivamente de todos los sucesos dentro de un salón de clases, sino que lo combinaban perfectamente con toques de ciencia ficción y realismo mágico.

Varias de las figuras presentadas se convirtieron en grandes artistas como Danna Paola o sonadas influencers como Natalia Juárez y Daniela Aedo.

No pretendo decir que esta telenovela es la perfección encarnada, pero sí un buen retrato de un productor, que, junto a su equipo, hicieron de los niños a principios de los 2000.

Ahora, siendo adultos, recordamos con total anhelo las hermosas tardes en que nos sentábamos a las 4 PM para ver dicha historia. ¡Gracias Nicandro Díaz!

1.- Mañana es para Siempre (2008)
Protagonizada por Silvia Navarro, Fernando Colunga y Lucero

¡Sin duda alguna! La mejor telenovela que hizo Nicandro Díaz, ya que, junto con su escritora Kary Fajer, respetaron muy bien el sentido de su original Pura Sangre (2007), con todo y el camino que debe enfrentar el protagonista Eduardo (Fernando Colunga) para convertirse en Franco Santoro.

Mañana es para Siempre es una telenovela que tiene un elenco muy variado, inclusive, un director de escena no tan bueno como Salvador Garcini, pero el talento pesó por encima de estos puntos. En esa época llegaba Silvia Navarro a Televisa después de grandes éxitos concluidos en TV Azteca, y la emparejaron con uno de los galanes más llamativos, Fernando Colunga y la antagonizaría Lucero, que en toda su carrera solo había hecho una villana, siendo esta la segunda.

Que se cuadrara bien el tema del misterio, las referencias y lo policiaco para adaptarse correctamente al mercado mexicano fue uno de los puntos que más me sorprenden de esta telenovela. El título es largo y por ello, es difícil de olvidar, el soundtrack es excelente, las locaciones son bellísimas, los foros están creíbles dentro de lo que cabe y cada detalle de producción, tomando en cuenta la utilería, es fenomenal.

No omiten en ningún momento las citas a Nicolás Maquiavelo e inclusive, Ignacio López Tarso en una muy breve participación recrea a un abogado llamado “Isaac Newton”.

En sí, cuando fue emitida por primera vez, era la telenovela del momento. Todo mundo entraba, queriendo hacer participaciones especiales, hasta el propio protagonista de la versión original Rafael Novoa.

Ver Mañana es para Siempre es también presenciar el punto de reunión de primeros actores como Rogelio Guerra, María Rojo, Luis Gimeno, Luis Bayardo y Yolanda Ciani. Ni hablar de las magníficas interpretaciones de Mario Iván Martínez y Dominika Paleta.

La historia marcó el que se ubicara de mejor forma a una de las protagonistas más sobresalientes de los últimos años: Ariadne Díaz.

Un problema recurrente que tenía Nicandro era en la elección de edades de los protagonistas. Sin embargo, en esta telenovela en particular, no se notó tanto ese defecto. Silvia estaba convincente, Lucero hacía de madre de una joven y Fernando Colunga, quizá podría desentonar, pero Rafael Novoa en la original tenía el mismo problema que “ya no podía aparentar ser un joven recién salido de la Universidad”.

Todo se hiló de manera magnífica. Es una pena que acabara a mediados del 2009, porque terminó su impacto opacado por otras telenovelas que se fueron emitiendo. Inclusive, siempre he dicho que esta telenovela fue la última ejemplar en el horario estelar, antes de entrar a una era oscura donde se produjeron muy malas telenovelas en el prime time hasta 2016.

Podría ser cuestionable, pero considero a Mañana es para Siempre como uno de los remakes más decentes que se han hecho de telenovelas extranjeras.

Descanse en paz

Reitero lo dicho en los primeros párrafos. Fui muy crítico con el trabajo de Nicandro, pero reconozco que fue una de las personalidades más importantes de la “Telenovela Infantil”, que sus últimos trabajos los fue cerrando con mayor dignidad y que un drama como Mañana es para Siempre podría hacernos creer precisamente lo que dice su propio título. Que en paz descanse, Nicandro Díaz.

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